martes, 19 de mayo de 2015

CÓMO SOY



“No oprimirás a tu prójimo, ni le robarás. No retendrás el salario del jornalero en tu casa hasta la mañana” (Levítico 19:13)


Durante años nos preguntamos el porqué de los conflictos entre pueblos, razas y naciones y aunque todo esto está escrito, debemos comenzar por analizar las relaciones más básicas.


Cómo trato al que está al lado?. Estaré tratando al próximo de la forma adecuada o simplemente desarrollo una agresión sistemática contra los que no miran, caminan o piensan de la misma forma que yo.


Si aspiro a ser respetado, considerado y valorado, lo mínimo que puedo hacer es dar aquello a lo que aspiro para mí. No es necesario hablar en términos de Dios para saber que siempre nuestros derechos terminan donde comienzan los del otro.


Pero hablemos del próximo por que este es el origen de la palabra “prójimo” tantas veces mencionada en la Biblia. Dios dice claramente en el segundo mandamiento que debo amar al próximo como a mi mismo (Mateo 19:19), y en este orden de ideas estoy obedeciendo o no?


En el metro, en el bus o en el carro, en hora pico estoy teniendo cuidado del que está al lado o lo agredo por la más mínima e involuntaria falta de su parte. No me excluyo de esto y meditando sobre el tema en el transporte público, primero debería pensar que si alguien me pisa no lo hace intencionalmente sino por accidente.


Nos falta mucho de esa compasión que Dios nos ha mostrado por nosotros y de esa misericordia que en Él es infinita. Sería interesante ver como en el relato de la paja en el ojo ajeno, cuál es primero en nuestra forma de dirigirnos a los demás, para esperar una respuesta similar.


PREGUNTA: Se ha sentido agredido hoy?


REFLEXIONE Y DECIDA!

- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –


¡SI EN ALGO LE HA ENRIQUECIDO ESTA REFLEXIÓN, NO OLVIDE COMPARTIRLA!