“Y
Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista, y bueno
para comer; también el árbol de vida en medio del huerto, y el árbol de la
ciencia del bien y del mal” (Génesis 2:9)
Se ha preguntado alguna vez porqué le
cuesta tanto buscar a Dios?. Puedo asegurarle que le es más fácil prender la
televisión, el computador o irse de compras que dedicar un tiempo en su cuarto a orar o leer
la Biblia.
Este ha sido el comportamiento del
hombre desde que descubrió la diferencia entre el bien y el mal. Cuando Dios
lo puso con pareja incluida en el huerto, le hizo provisión de todo lo
que podía necesitar. Le dio la tarea de sojuzgar la tierra y lo que había en ella; pero fracasó en este empeño.
También le mostró la creación que
incluía el árbol de la vida y le hizo una salvedad sobre el del bien y el
mal. Le dijo claramente que si tomaba de éste último, sabría lo bueno y lo malo del
mundo y el hombre optó por esto.
Una vez que se encontró con la
elemental verdad de que estaba desnudo y todas sus implicaciones, no quiso acercarse a Dios y pedir perdón. Con seguridad, si hubiera optado por el árbol de vida todo sería diferente. Prefirió tentado por Satanás, tomar algo para lo que no estaba capacitado o autorizado.
Dios tuvo que disciplinarlo y de ahí
en adelante y como hijos de una naturaleza caída, la tendencia del
hombre es buscar todo en el mundo menos a Dios. Siempre está escondiéndose
de Él para pecar sin recordar que el Señor es Omnipresente y lo ve todo y
todo el tiempo. La Biblia dice que aunque nos escondamos debajo de las rocas, Él
los encontrará y nada de lo que hacemos es oculto para Él (Jeremías 49:10).
Es por esto que el hombre busca
filosofías, creencias y doctrinas utópicas para justificar y esconder su pecado
antes que la verdad de Dios. Sólo cuando el hombre se encuentra con Cristo
comienza a entender las verdades que le conducen a la vida.
En este momento y movido por el
Espíritu, siente esa necesidad de buscar de Dios y sus principios para vivirlos.
Que éste buscar apreciado lector, sea su caso y no el de aquellos que prefieren
todo lo que representa muerte antes que vida.
PREGUNTA: Todavía prefiere usted la
televisión?
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REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –
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