“Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de
salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación” (2 Corintios 6:2).
Siguiendo con el tema de conocer o no
la verdad, la Biblia nos cuenta cómo ésta elemental, pero definitiva verdad nos
puede o no librar. El fuego puede o no quemar y la decisión de meter o no el
dedo en la llama, es algo que únicamente decide usted.
De ahí la importancia de reaccionar
basados en el conocimiento y desarrollar las acciones correctivas a tomar,
pues nada nos eximirá de la responsabilidad. La ignorancia nunca será excusa
ante la ley de los hombres y menos delante de Dios.
Tal vez en una sociedad permisiva como
la de hoy, en la que se conceden todos los derechos frente al pecado; pero a
Dios no se le puede ocultar o justificar nada, Él no puede ser burlado (Gálatas 6:7). Un día
estaremos frente a frente con Él y en su calidad de omnisciente, omnipresente, que todo lo sabe, nos va a permitir ver el video de nuestra vida en la carne.
Qué hicimos o cómo la vivimos?. Es de vital
importancia, darse una oportunidad con Dios y frente a la Biblia. Leer,
escudriñar y si después de esto decidimos hacer caso omiso de Su voluntad,
estaremos listos para meter en dedo en el fuego y el señor se limitará a
respetar aquello por lo que hemos optado.
Lo que allí está contenido nos libera
o nos condena, sólo que la responsabilidad de dar a conocer el mensaje de
salvación por parte de Dios habrá cesado y será sólo nuestra.
Saltarse el “PARE” de la esquina en el
carro, puede determinar o no un choque, estableciendo un responsable en el
mismo y las consecuencias que se deriven; aceptar o subestimar la palabra de
Dios, determinará nuestro futuro eterno.
Le invitamos apreciado lector a darse
esa oportunidad frente a la palabra de Dios, a no pensar en la comodidad de
dilatar esta decisión. A no creer que el contenido de la Biblia es una serie de historias
de ficción y a separase de todos esos sofismas de distracción del mundo. Unos
más atractivos que otros en la carne;
pero al fin sofismas.
A no confiar en que en los últimos días de su vida podrá
buscar de Dios, pues ese último día puede ser hoy.
PREGUNTA: Qué tanto conoce usted de la Biblia
como la voluntad de Dios?
REFLEXIONE Y DECIDA!
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REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –
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