jueves, 22 de mayo de 2014

VERDADES BÁSICAS – LA FAMILIA



“…considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” (Hebreos 10:24,25)

Cuando llegamos al mundo, entramos a ser parte de una familia conformada por otros miembros. Esto mismo ocurre cuando recibimos a Cristo en nuestras vidas, nacemos de nuevo (Espiritualmente) “No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.” (Juan 3:7) y para el caso que nos ocupa, llegamos a ser parte de “La Iglesia”.


La iglesia es el organismo compuesto por cada uno de los cristianos genuinos de toda nación y lengua, y no un edificio de ladrillo y cemento como se le llama normalmente. Es un organismo vivo y no el órgano estático y sin vida que se conoce. La iglesia también es considerada como el cuerpo de Cristo.


Podemos hablar de dos clases: La iglesia universal compuesta por personas de todo el mundo y la iglesia local, en la que se congregan los creyentes de una zona en particular. Ambas desde su posición son muy importantes y con una tarea específica en el encargo dejado por el señor Jesús Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” (Marcos 16:15).


La importancia de la iglesia, radica en que como miembros de una familia debemos interactuar unos con otros; de lo contrario no podemos considerarnos familia. Como pertenecer al cuerpo de Cristo, a la iglesia si nuestro tiempo lo dedicamos a los incrédulos y las actividades propias del mundo?.


Desde luego que no podemos encerrarnos en un entorno de creyentes, pues quién le hablará de Cristo a los perdidos; pero sólo en la iglesia encontraremos compañerismo, formación, consuelo, apoyo y otros comportamientos de familia que no hallaremos en el mundo y con personas que hablan otro lenguaje espiritual diferente “Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones” (Hechos 2:42).


El tema central de nuestra vida con Cristo, es esa relación restaurada y fluida con Dios en un proceso de santificación que nos llevará hasta el último día de nuestra vida terrenal; pero en este, la iglesia juega un papel más que importante: “Familia”

PREGUNTA: Se reúne usted con su familia? 


REFLEXIONE Y DECIDA!

- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –



¡SI EN ALGO LE HA ENRIQUECIDO ESTA REFLEXIÓN, NO OLVIDE COMPARTIRLA!