viernes, 28 de marzo de 2014

ENTRE RELIGIÓN Y RELACIÓN



“Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.” (Colosenses 2:8)
Una de la grandes limitantes de la humanidad en todo sentido es la falta de conocimiento, que llevada a otros estrados se convierte en ignorancia. Aunque este  último término suena un  poco peyorativo no lo es, y uno debe ser consiente de que no lo sabe todo.

Dentro de estas falencias en el conocimiento, se encuentra la más importante y es el tema que tiene que ver con Dios. Este es el asunto más importante en la vida de un ser humano y es el más subestimado. No saber en que consiste la voluntad del Creador, es pretender ignorar a Aquel que da origen a todo en la vida del ser humano.

Lo irónico de esto es que aquellos que en teoría han sido llamados al conocimiento, lo han convertido en una “RELIGIÓN” y no en un “RELACIÓN”; de ahí nuestro titulo de hoy. El primero en rechazar las religiones es Dios y desde el mismo comienzo el ha procurado una “RELACIÖN” directa con el hombre.

Es hora de documentarse y salir de la ignorancia sobre un asunto que marcará el futuro eterno de usted y los que le rodean. De salir como lo dice nuestro verso, de tantas reglas impuestas que nada tienen que ver con el plan bíblico, que lo hacen un religioso y no un ser con la capacidad de interactuar con Dios.

Pasar de ser una simple creatura a ser un hijo con todas las prerrogativas que esto implica, y no pertenecer a una RELIGIÓN en la cual muy poco conoce la verdad, para establecer un “RELACIÓN” directa con el Padre. “Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos” (Mateo 23:9).

Cuando el hombre es consiente de su necesidad de Cristo, lo acepta y ya no vive una religión, se convierte en “hijo de Dios”.
PREGUNTA: Es usted ya un hijo de Dios?

REFLEXIONE Y DECIDA!
- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –

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