jueves, 19 de mayo de 2011

DEL CAOS AL ORDEN



“Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche”(Génesis 1:2-5)
Como podemos observar, el caos era el elemento predominante en este panorama. Dios lo puso en orden y a pesar de los estragos hechos por el hombre a lo largo de la historia, la tierra todavía puede mostrar algo del trabajo del Creador.
Ahora leamos esta descripción:  “como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia…” (Romanos 1:28-31)
Le parece que hay alguna similitud en estos dos relatos bíblicos?
Si comenzamos un juicioso paralelo, entre esta descripción de la tierra hecha por la Biblia antes y después de la intervención de Dios, encontramos una muy evidente similitud, entre: “la tierra antes del Génesis y el hombre de hoy sin Cristo”.
 A pesar de los logros permitidos por Dios, el hombre y su entorno revela un caos total como lo describe la Biblia en el libro de Romanos.
Otro semejanza, es la presencia de Dios  en los dos eventos a pesar de la diferencia de tiempo y elementos a contemplar. Él, siempre esta dispuesto a establecer el orden. Sin embargo y a pesar de las evidencias, el hombre se niega obstinadamente a aceptar a aquel que puede poner orden en su vida.
El mundo de hoy y propiciado por el hombre, no es el concebido por Dios desde el principio. Este dista mucho del ordenado por Él y las metas de bienestar y paz que tanto persigue la humanidad a través de los líderes mundiales, son una perfecta utopía a la luz de la Biblia. “……..el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche; que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina…., y no escaparán (1 Tesalonicenses 5:2,3)
No menospreciemos este llamado que Dios nos hace, pues el Espíritu que se movía sobre el caos en la creación, es el mismo que hoy se mueve sobre la humanidad y llega a morar en aquellos que aceptan a Cristo. “No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno.  Absteneos de toda especie de mal (1 Tesalonicenses 5:19-22)
Permitamos que Dios realice ese  trabajo imposible para el hombre de poner orden en su vida. Él es el único que puede sacarnos del caos del pecado a la luz de la vida.
PREGUNTA: En qué condición quiere  vivir usted ahora y por la eternidad. En el caos o en la luz?
MEDITELO Y DECIDA YA!
- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 -