Si revisamos la historia bíblica, encontramos que Dios siempre ha sido el de la iniciativa en su relación con el hombre “Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida” (Génesis 2:7)
Dios lo creó y qué Padre no quiere interactuar con sus hijos?
Observando uno de los frescos realizados por el pintor Miguel Ángel en el techo de la capilla Sixtina, la escena producto de la imaginación del artista, nos muestra a Dios extendiendo su mano de forma vigorosa e interesada hacia el hombre, mientras que este último lo hace; pero con muy poco interés “Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido que buscara a Dios” (Salmos 53:2) Podríamos pensar que el significado de esta imagen, habla del contraste entre el todopoder del Creador y la insignificancia del creado o en el caso que nos ocupa, de la falta de interés del hombre para desarrollar una relación con Dios y depender de Él.
Esto debe ser un motivo de tristeza para Dios y lo expresa claramente, cuando el pueblo de Israel lo deja a Él, prefiriendo a un hombre como rey. “Dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan; porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado” (1 Samuel 8:7)
Siempre y de diversas formas Dios ha buscado al hombre, y el tiempo presente no es la excepción “Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, para ver si había algún entendido” (Salmos 14:2) Bíblicamente hablando, estamos en “el tiempo de la gracia de la iglesia” y dentro de este, se habla de un “avivamiento”, en el que estamos y cuyo propósito es dar a conocer la forma, a través de la cual la humanidad entera puede restablecer esa relación perdida “…la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres”(Tito 2:11)
.Sin embargo el hombre, no importando la época, con desarrollo tecnológico o sin este, sigue prefiriendo la comodidad al compromiso con Dios “Dice el necio en su corazón: No hay Dios”(Salmos 14:1)
Desafortunadamente para el hombre y como todo proceso, este también tiene sus términos y a pesar de que Dios ha esperado pacientemente, “El Señor no retarda su promesa,……. sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Pedro 3:9) un día que podría ser hoy, va a terminar.
Recuerde que este día puede ser hoy, tal vez más tarde!
PREGUNTA: Y usted, ya restableció esa relación rota con Dios?
MEDITELO Y DECIDA!
- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 -
