“No
sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?”(1 Corintios 3:16)
El mundo de hoy trata
mucho con el cuidado del cuerpo, pues la figura y los músculos son factor de
suma importancia en el estilo de vida. El gimnasio, los aeróbicos y algunos
métodos menos ortodoxos como las dietas, pastillas, cirugías, tatuajes y
tratamientos de toda índole están a la orden del día. La moda y todo lo diseñado
para mostrar algo que no se tiene, implica una carrera permanente para lucir
con los estándares que la sociedad impone y representa un negocio
multimillonario.
Aunque cuidar nuestro
cuerpo y tenerlo saludable es importante para Dios; no
lo es más que cuidar nuestra vida espiritual “Por
que el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo
aprovecha” (1Timoteo 4:8). La prioridad debe estar centrada en un proceso
de santidad, cuidando del cuerpo como lo dice en la Biblia; pero no convirtiéndonos
en esclavos de este.
Que cada día estemos
muriendo al pecado “..No reine pues el pecado en
vuestro cuerpo mortal….” (Romanos
6:12), y de esta manera poder sembrar en las cosas de Dios. “no mirando nosotros las cosas que se ven;…….las cosas
que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas” (2 Corintios 4:18).
Vemos claramente, cómo
nuestro interés debe centrarse en la búsqueda de la santidad y un estilo de
vida que imite al señor Jesucristo, antes que aparentar externamente. Las sustancias
que le suministramos a nuestros cuerpos y nuestros estilos de vida, son un
aspecto íntimamente relacionado con la voluntad de Dios y de esto hablaremos en
la siguiente reflexión.
Por lo pronto,
pensemos que un día nos encontraremos con Él y daremos cuenta de cualquier cosa
que hayamos hecho en pro o en contra de nuestro cuerpo a nivel espiritual y
físico. “Porque es necesario que todos nosotros
comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que
haya hecho mientras estaba en el cuerpo…..” (2
Corintios 6:10).
PREGUNTA: A qué le da
más importancia, a la figura y los músculos o a la santidad en su cuerpo?
MEDITELO
Y DECIDA YA!
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REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 -