martes, 19 de agosto de 2025

LA NECESIDAD

No sabemos cómo es su vida, si ha sido de abundancia o de necesidad, si haya nacido en la opulencia o en la miseria como suele pasar; o si simplemente es uno más del promedio que lucha en el día a día para vivir.

Sólo cuando usted ha visto o vivido de cerca la imposibilidad de obtener algo tan básico como el alimento, es cuando se puede dimensionar la importancia de valorar lo que se recibe de Dios.

Hay mucha gente que no tiene que comer y hay otra que tiene mucho que comer, pero no puede hacerlo. Una enfermedad no se lo permite y cualquiera de estas dos son formas de necesidad se convierte en la misma, no se puede.

Una por no tener y otra por no poder, y tal vez en una combinación de ambas pude vivirlo un tiempo atrás. Dicotomías de la vida que sólo se entienden cuando se viven y que luego a la luz de la Biblia se entienden.

Muchos años atrás vi a una sobrina adolescente cómo rechazaba un plato abundante de comida simplemente porque no le gustaba. “Tu no sabes cuánta gente quisiera tener ese plato en este momento”, le dije.

Frase que bastó para tener un choque que subsiste hasta el día de hoy en su dureza de corazón, y comportamiento que le ha costado salud, matrimonio y vivir en soledad. La justicia de Dios no se hace esperar y sigo orando porque un día incline su corazón a Cristo.

Por estos días tenemos un buen amigo y hermano en la fe, sirviendo con un ministerio cristiano en un país africano en conflicto y la necesidad es apremiante. Basta leer sus correos mensuales contando la necesidad de ese pueblo.

Y así hay muchas naciones en este momento, pero lo increíble es que todavía la gente no entiende la bendición que se recibe cada mañana en la mesa de la mano de Dios. Somos tan duros de corazón que un día no muy lejano tendremos que dar cuenta.

Sobra decir que un paseíto por uno de estos estos países no le sobra a muchos, un tiempo de necesidad que les permita dimensionar lo que tienen y agradecer al que todo lo da. No sobra decir que toda esta gente necesita oración, y mucha.

El mundo en general no cree en la necesidad de un Salvador, pero un día se van a encontrar con que era todo lo que necesitaban para vivir “…impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella” (2 Timoteo 3:4,5)

REFLEXIÓN: La necesidad es madre muchas cosas, y la más importante, de la salvación!

LA REFLEXION ES PARTE DE LA VIDA!

- BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –

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