jueves, 18 de abril de 2024

INSONDABLE

Cuando nos sentamos a hacer un honesto resumen de nuestra vida y resultados, nos encontramos con que nada somos. Ni el más optimista de los resultados nos muestra como algo aceptable delante de nosotros mismos.

Y si eso tenemos como resultado para nosotros, qué diremos delante de un Dios tres veces Santo. Es cierto que con mucha facilidad podemos ocultarlo delante de los hombres y aún de los más cercanos, pero eso no va a cambiar nuestra miseria personal, física y sobre todo espiritual.

Es aquí cuando en el mejor de los casos tocamos fondo y empezamos a buscar soluciones, pero dónde?. No siempre lo haremos desde la comodidad de nuestro entorno, lo más probable es que lo hagamos desde un hospital, una cárcel, un manicomio o en la indigencia.

Tampoco será siempre y en la angustia que nos rodea la mejor opción la que encontremos. En los momentos difíciles somos aún más vulnerables y en este orden de ideas nos pegamos de un avión fallando.

Recuerdo cómo en mi calidad de religioso me sentía vació y quise empezar la búsqueda de algo que llenara mis vacíos. Pasé por un par de sectas, que en su apariencia de piedad sólo resultaban un paso más hacia el abismo.

No encontrando solución a mí necesidad seguí adelante, pero el Señor se encargó de mí. Por supuesto al buen estilo de un Dios Santo, que me matriculó en un proceso de pérdidas que me dejaron con una mano adelante y otra atrás, pero me encontré con Cristo.

La reflexión de hoy habla de: “Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos…” (Romanos 11:33a), y esto en razón para mí, de que hoy  y a pesar que he pasado más de treinta años en el Camino, todavía no entiendo las razones que tuvo el Señor para recogerme.

Nada que cuadre con la lógica de un limitado ser humano como yo y que a pesar del gozo que brinda el saberme hijo de Dios a través de Cristo, sólo lo habré de entender cuando esté con Él “…pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos,…” (1 Corintios 15:51-53).

Sólo cuando demos en Su voluntad ese paso a la perfección, lo entenderemos “Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! (Romanos 11:33b). Por lo pronto, sólo lo veremos a la luz de su infinita Gracia!.

REFLEXIÓN: Como entender la relación de Dios con su creación si no es el amor!

REFLEXIONAR TRANSFORMA!

- BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –

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