jueves, 11 de abril de 2024

NO HAY DIFERENCIA

Por estos días vimos a mi suegra debatirse entre seguir viviendo o morir; a pesar de lo álgido que pueda lucir el asunto para los incrédulos, con mi familia asumimos la posición de simplemente esperar la voluntad de Dios.

Fueron días difíciles, en los que la vimos más del otro lado que de este, pero con todo esto, nuestra oración y la de todos los que nos acompañaron, giraba alrededor de tres puntos: primero que no sufra pues es complicado ver a un ser humano así, conectado a un poco de aparatos y reducido a su mínima expresión.

La segunda fue y muy importante, la de que en algún momento recibiera a Cristo en su corazón. Esta es una familia que durante muchos años se les ha compartido, pero sus corazones no se han abierto al definitivo mensaje de Cristo.

La tercera, estaba orientada a algo que muy pocos tienen la capacidad de dimensionar: la voluntad de Dios!. De boca para afuera todos o muchos hablan de Dios, pero son realmente muy pocos los que dependen de Él y Su voluntad no importa el resultado, y que como dice la Biblia es: “…buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Romanos 12:2).

Así las cosas, no podemos más que sacar como ficha resumen, que esa voluntad siempre hace presencia tanto en la vida del creyente, como en la del incrédulo. No importa si el creyente tiene la capacidad de dimensionarlo, o si el incrédulo la acepta o no.

Desde el más trivial de los eventos como partirse una uña, hasta el hecho de que un corazón deje de funcionar. Desde un simple choque vehicular en la esquina, hasta un terremoto de 8 grados.

Es sólo que se está tan acostumbrado a mantener la voluntad del Señor fuera de la ecuación, que priman las razones del científico, del médico o del vulcanólogo. Siempre tratando de buscar razones fuera del plan perfecto de Dios.

La apenas obvia  intervención del Creador en su creación es permanente, es sólo cuestión de darle el lugar que merece y descansar en sus decisiones!

REFLEXIÓN: Un gran barco o un bote no se mueve sin la voluntad de su capitán!

REFLEXIONAR TRANSFORMA!

- BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –

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