A partir de la desobediencia en el
Edén, la humanidad quedó en una condición bastante complicada. Esa condición se
define en una sola palabra, que aunque dura es la verdad: Pecado.
Estamos hablando y de acuerdo a la
Biblia no de un acto específico que hoy se da y mañana no; se trata de una
condición de la que no se puede salir, sino a través de un acto soberano que
sólo puede cumplir Dios.
Pensando en esto y las implicaciones
eternas para el hombre, Dios mismo diseñó un plan que ha estado vigente desde
hace algo más de dos mil años. Este contemplaba un sacrificio perfecto y que sólo
podía ser cumplido por un ser perfecto en todo sentido.
El mismo Hijo de Dios fue el encargado
de hacerlo, desde entonces y hasta su regreso está vigente pata todos los que quieran
recibirlo. Sólo Él puede librar a la humanidad de una eternidad sin Dios “el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan
gran muerte” (2 Corintios 1:10).
Apoyados en la Biblia que es la
indubitable palabra de Dios, podemos afirmar que ya nos libró a los que hemos aceptado
a Cristo en el corazón, libra a los que quieran recibirle hoy y librará a los
que le busquen hasta su regreso.
El señor Jesús viene de nuevo, lo hará
para buscar su iglesia compuesta por todos estos privilegiados y luego establecer
el Milenio. Son muchas las bendiciones espirituales que ofrece Dios en su Hijo
además de la salvación, lo importante es que lo reciban y tomen la decisión más
importante de la vida.
No hablamos de bendición traducida en
bienestar o riqueza material, se trata de la maravillosa posibilidad de estar
con Él por la eternidad. Un cielo o un infierno están esperando por la
humanidad y usted dónde quiere estar?
Muchos creen que no hay solución a su
triste condición de lucha diaria, otros que esto ya pasó y otros que habrá
tiempo para decidir; el verso de ésta reflexión
habla de pasado, presente y futuro con oportunidad para todos; lo que no hay es
tiempo para pensarlo pues éste puede ser su último minuto.
Si fuera una promoción de televisores
de última generación a buen precio, usted no lo pensaría; pero como la
salvación es gratuita lo dejará para después. Que no le coja el regreso de Cristo
o la muerte física sin decidir.
REFLEXIÓN: Para las promociones
estamos listos; pero no para la salvación!
REFLEXIÓN QUE CAMBIA!
- BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –
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