“No os hagáis tesoros en la tierra, donde la
polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino
haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde
ladrones no minan ni hurtan….“(Mateo 6:19-21)
Existe
una gran diferencia entre “El hilo fino de la vida” y “El fino hilo de la
vida”. La primera muestra la calidad y la otra la fragilidad. Esto
para significar que no importa la clase de vida que se tenga, de abundancia o
de escases, esta vida siempre pende de algo muy frágil; que las cosas pueden cambiar
ahora mismo y de una manera irreversible.
Se
puede estar gozando de una “perfecta” salud y terminar el día en una clínica
con un diagnostico difícil o simplemente no terminarlo. Esto tiene que ver
también con la economía, la familia, el clima, su ciudad o cualquier aspecto
susceptible de cambios. Es cuando debemos mirar en qué estamos invirtiendo
nuestro tiempo y esfuerzo.
Lo
que hace, dice y piensa usted , lo perfila cada día como alguien mejor para
usted mismo y los demás; y lo más
importante, todo esto lo prepara para presentarse delante
de Dios?. La Biblia dice que un día y puede ser hoy, dejaremos este mundo y que
si no hemos arreglado nuestras cuentas a través del señor Jesucristo, ya puede ser
muy tarde.
Es
responsabilidad individual ver cuál va a ser su futuro eterno. Muchos ni
siquiera lo contemplan y lo enmarcan en una filosofía que los lleva a dilatar
esta decisión; pero la realidad es que hay un solo camino planteado por Dios
desde antes de la fundación del mundo.
Todo
el humanismo posterior a lo enseñado por Dios, no tiene validez eterna y sería
bueno que usted dedicara por lo menos un rato, a pensar qué tan listo está para
dar este paso que lo ubicará en una eternidad con Dios o sin Él.
PREGUNTA:
Ya esta listo?
MEDITELO Y DECIDA!
- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –