"Mi socorro
viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero,
ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni dormirá El
que guarda a Israel" (Salmos 121:2-4)
En todas partes del mundo el saludo a
alguien es un buenos días, tardes o noches, seguido de un cómo esta?. Sea en
alemán, ingles, chino o castellano, el asunto tiene siempre que encontrarse con
la necesaria pregunta del “cómo” se encuentra la otra persona.
Bien, regular o mal siempre habrá
una respuesta, de alegría o queja; pero
respuesta. Esto en razón de nuestra condición de finitos e imperfectos; muchos
se acuestan y no amanecen y si lo hacen, no sabemos cómo lo hacen.
Pensando en la oración y la forma
adecuada de dirigirnos a Dios, muchas
veces le saludamos y también quisiéramos preguntarle cómo está. En la sociedad
de hoy no hacemos mucha diferencia en la forma de dirigirnos a las personas.
Siglos atrás se tenía en cuenta la
dignidad del interlocutor y se vivía un mundo de barreras sociales y económicas.
Llegar delante de un noble implicaba reverencia; pero para bien o para mal,
esto ya no aplica en la mayoría de los países.
Este es un mundo en el que todos somos
iguales; pero cuando nos dirigimos a Dios el asunto debe tomarse en otros
términos. Obviamente Dios no necesita que se le pregunte si amaneció, la Biblia
dice que Él nunca duerme y más bien somos nosotros, los que nuestra pequeñez en
el universo, nos hace perder de vista el sol por unas horas.
Tampoco un “cómo” esta, pues Su
perfección, omnisciencia, omnipresencia y todo poder lo excluyen de cualquier
evento fortuito a los que sí estamos expuestos siempre como humanos.
Es muy importante el ser reverentes con
el Creador, no obstante debiéramos desarrollar una familiaridad respetuosa de
Padre a hijo con Él. Que nos acerquemos a Dios sí y en cada momento para buscar
su dirección, compañía y cuidado; pero que esa familiaridad responda a un deseo
infinito de ser leales en amor con Él.
PREGUNTA: Cómo saluda a usted al Dios
todopoderoso?
REFLEXIONE Y DECIDA!
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REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –
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