martes, 24 de septiembre de 2013

CÓMO ACERCARSE?



“…puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios” (2 Corintios 7:1)
Cada cuánto y cómo buscamos al Señor?. Procuramos un genuino acercamiento o simplemente es algo ocasional?. Oír no implica escuchar, así como mirar no significa ver y esto hace una gran diferencia en nuestra relación con Dios.
Estar con alguien no representa comunión, pues podemos pasar el día o el mes con una persona cuyos ideales no concuerdan con los nuestros y en este orden de ideas, no siempre estamos en lo que debemos y menos con el Señor.
Esto debería partir de la certeza de que Dios en su Omnipresencia siempre está con nosotros, que está a nuestro lado y que nada podemos sustraer de Su mirada o de Su oído; pero este no es el caso de la mayoría de los creyentes. La religiosidad es una condición propia del ser humano y no sólo hablamos de lo que tiene que ver con Dios; pues esta se manifiesta en todas las áreas de la vida de hombre y que difícil es sustraernos.
Cuando invocamos a Dios, lo hacemos realmente consientes de la calidad de Persona que  invitamos, y lo hacemos en el lugar y tiempo indicado?. Acaso pensamos en algún momento que Él tiene el poder de cortar o prolongar nuestra vida en ese preciso instante.
Si lo hiciéramos a conciencia, nos alistaríamos espiritual, emocional y hasta físicamente para ese encuentro. Pensaríamos previa y cuidadosamente sobre los temas que vamos a tratar con Él; dispondríamos el corazón para escuchar, adoptaríamos la posición correcta, nos peinaríamos y usaríamos el perfume más caro.
Estas son las condiciones mínimas para acercarnos de la manera adecuada a Aquel de quien depende nuestro siguiente minuto; pero lo más importante será nuestra disposición espiritual y santidad.

PREGUNTA: Realmente se acerca usted a Dios o simplemente le llama?

MEDITELO Y DECIDA!
- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –

¡SI EN ALGO LE HA ENRIQUECIDO ESTA REFLEXIÓN, NO OLVIDE COMPARTIRLA!