martes, 27 de agosto de 2013

SUFICIENTE



Meditad bien sobre vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto” (Hageo 1:5-6)

Analizando el panorama del mundo en general, encontramos una ausencia de satisfacción en todo que hace. El hombre siempre quiere algo más; llámese hogar, estudio, dinero, posesiones, trabajo, empresa, etc. En cualquier área en la que el ser humano se desempeña siempre quiere algo más.

Recordamos cómo a la pregunta: “qué otra cosa quiere tener señor Rockefeller?, su respuesta siempre fue: “un millón más”. Este fue un hombre norteamericano y ejemplo de este carácter, que partiendo de nada amaso una gran fortuna en su tiempo pasando por encima de muchos; pero que nunca obtuvo satisfacción en su carrera.

Un principio muy diferente es el que nos enseña Dios y hasta dónde lo interiorizamos los que le hemos creído?. La Biblia nos muestra que cuando seamos transformados para vivir con Dios en cielo nuevo y tierra nueva, ya no tendremos necesidad de nada más. “No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos” (Apocalipsis 22:5); pero que mientras estemos aquí, Él mismo se encargara de proveer lo necesario.

Entonces porqué insistir en ir al ritmo del mundo en esa carrera consumista de tener y tener?. La verdad es que con la sola opción de tener a Dios como Padre, todos nuestros deseos deberían estar satisfechos. En toda la Biblia encontramos versos que nos invitan a depender sólo de Dios; pero que tanto los vivimos?

Existe una gran diferencia entre lo necesario y lo que se desea!


PREGUNTA: Es Dios suficiente para usted?


MEDITELO Y DECIDA!

- REFLEXIÓN BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –


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