Informes recientes hablan de la deserción de pastores en el mundo, es muy triste ver las cifras y aún más las causas que determinan estas bajas que muy pocos conocemos. Para no ir tan lejos podemos hablar de conflictos de iglesia, agotamiento, finanzas personales y asuntos de familia entre otras.
Días atrás nos encontramos con que un “pastor” que conocemos en otra ciudad ha venido revelando su adulterio, no con una; sino con varias mujeres, argumentando que hace tiempo se dejó con su esposa. No sólo lo manifiesta abiertamente, sino que pretende seguir en su puesto.
Años atrás pasamos por allá en nuestra estadía en dicha ciudad y hasta los apoyamos sugiriéndola por presentar una doctrina sana. Empezamos a frecuentarla como familia para confirmar lo pensado.
Poco a poco e indagando nos fuimos encontrando con que esta congregación fue iniciada por un señor muerto ya, que prácticamente indujo a sus dos hijos varones a ser “pastores”, en aras tal vez de resarcir su pecado pasado.
Cuando nos dispusimos a cuestionar los comportamientos pocos sanos se nos dijo el consabido “ahí está la puerta”. Esta es otra triste razón por las que de un momento para otro desaparecen “pastores” o congregaciones enteras.
Con preocupación nos preguntamos, si estos señores que desertan tuvieron claro su llamado en algún momento?. Era el pastorado su puesto dentro de la iglesia o todo esto fue producto de emociones y nada más “Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto” (Apocalipsis 3:1).
Todos tenemos nuestro pecado como parte de nuestra naturaleza caída, pero deberíamos hacer un examen riguroso de si somos o no aptos para el ministerio. Ya bastante desvirtuada está la religión tradicional en razón de su pobre testimonio, pero qué hay de aquellos que en teoría han tenido un encuentro genuino con el Salvador?.
Daño grave se le hace a la masa incrédula por la que murió el Señor, y llámese religión tradicional, sectas o lo que consideramos la Iglesia de Cristo, tendremos que dar cuenta un día.
Definitivamente el ministerio no es para cualquiera, estas son cifras de manejo secular, y vale la pena reflexionar sobre un 25% por agotamiento, un 12% por desmembramiento de la familia, 19% por finanzas y otras causas.
Pocos imaginan que cada mes unos 1500 pastores dejan el ministerio por conflictos al sentirse agotados o por alguna caída moral.
REFLEXIÓN: Preocupante lo que pasa, pero más aun lo que oiremos del Señor un día!
REFLEXIONAR ES INHERENTE AL SABIO!
- BASADA EN LA VERSIÓN REINA-VALERA 1.960 –
¡COMPARTIR PALABRA HACE LA DIFERENCIA!